
Consejos prácticos para visitar Los Bañales con o sin niños
Si estás pensando en visitar el yacimiento romano de Los Bañales, en la comarca de las Cinco Villas, estos consejos son para ti.
En el yacimiento no hay máquinas expendedoras ni bares (el más cercano está en Layana), así que llevar agua suficiente es fundamental, especialmente en días calurosos. Tampoco cuenta con baños ni merendero, por cierto.
Los caminos que unen las distintas zonas de Los Bañales se pueden recorrer en coche, en bici o a pie, y las zonas de parking están bien señalizadas. Nosotros, moviéndonos de un punto a otro en coche, tardamos casi dos horas en realizar la visita por libre.
Los caminos no están asfaltados y los senderos son de tierra, así que lo mejor es llevar calzado cerrado y que sujete el pie. En verano, con deportivas o incluso con sandalias de montaña es suficiente para caminar cómodamente y no estar sacando piedritas del zapato cada dos metros.

La sombra escasea en el yacimiento de Los Bañales y cuando llega el calor es imprescindible protegerse del sol. Así que ya sabes, lleva gorra o sombrero y una buena crema solar.
Para llegar a las ruinas que están en la parte más alta de El Pueyo hay que subir la ladera del cerro por una escalera que no es accesible para personas con movilidad reducida.

El yacimiento de Los Bañales está rodeado de campos de cultivo pero no hay que olvidar que es un sitio arqueológico. Peques y mayores tenemos que cuidarlo y no dañar los restos, así que está prohibido llevar pelotas, patinetes o cualquier otro elemento potencialmente peligroso.
Ojo con los tropezones y las caídas, sobre todo cuando estés en el cerro de El Pueyo disfrutando del paisaje, pues es el punto de mayor altitud. Y ten en cuenta que, tanto por su seguridad como por la del yacimiento, los niños deben ir acompañados por un adulto.
